OTTAWA - La promesa políticamente lastimada del gobierno de Trudeau de garantizar "equidad tributaria" para la clase media recibió otra paliza el lunes en medio de revelaciones sobre la extendida y perfectamente legal práctica entre los canadienses ultra ricos de albergar efectivo en paraísos fiscales en el extranjero.
Entre los 13,4 millones de documentos filtrados, conocidos como "Paradise Papers", se encontraban los nombres del ex primer ministro liberal Jean Chretien y el principal recaudador de fondos del partido, Stephen Bronfman; la mera mención de quién dio nuevas municiones para que la oposición acusara al primer ministro Justin Trudeau de liderando un gobierno éticamente desafiado.
Ni la Agencia Tributaria de Canadá ni ninguna corte han determinado que ninguno de los canadienses identificados en los documentos haya hecho algo incorrecto, y tanto Bronfman como Chretien negaron cualquier participación en esquemas de evasión de impuestos en alta mar.
Aún así, el líder conservador Andrew Scheer calificó a Trudeau como un hipócrita por buscar agresivamente poner fin a las ventajas impositivas para las pequeñas empresas, mientras que prácticamente no toma medidas para acabar con los complicados planes de paraíso fiscal utilizados por los súper ricos.
Guy Caron, el hombre de punto del NDP en los Comunes, se unió a la refriega, acusando a la CRA de siempre dejar ir al "gran pez" cuando se trata de evasión de impuestos.
Trudeau se negó a hablar sobre ningún caso específico mencionado en los documentos, pero se comprometió a investigar las conexiones canadienses.
"Estamos totalmente comprometidos con la lucha contra la evasión y la evasión fiscal. Dejaré que los individuos comenten sobre sus propias situaciones, pero con respecto a Paradise Papers, la CRA está revisando enlaces a entidades canadienses y tomará todas las medidas apropiadas", dijo a los Comunes. durante el período de preguntas.
Los detalles, publicados por miembros del Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación, marcan la mayor fuga de documentos de paraísos fiscales que involucran a los canadienses. Los documentos -registros de clientes de la firma de abogados offshore Appleby, así como algunos registros de las firmas de servicios corporativos offshore Estera y Asiaciti Trust- contienen los nombres de más de 3.000 canadienses.
De acuerdo con Toronto Star y CBC / Radio Canada, los registros sugieren que Bronfman y su empresa de inversión con sede en Montreal, Claridge Inc., estaban vinculados a un fideicomiso offshore en las Islas Caimán. El informe planteó preguntas sobre una serie complicada de transacciones que involucran personas con vínculos con los partidos liberales.
En un comunicado, Bronfman dijo que hizo un único préstamo, en condiciones de independencia y totalmente comercial, hace unos 25 años, al fideicomiso que se pagó cinco meses después, una transacción que cumplía totalmente con la ley canadiense.
Bronfman, un amigo personal cercano de Trudeau, dijo que nunca ha financiado ni usado fideicomisos en el exterior, y que todos sus fideicomisos canadienses han pagado todos los impuestos federales sobre sus ingresos.
"Stephen Bronfman es un canadiense orgulloso y siempre ha cumplido totalmente con todos los requisitos legales, incluso con respecto a los impuestos", dijo el comunicado.
También entre los documentos filtrados había un registro de inversores en Madagascar Oil que enumera que Chrétien recibió 100.000 opciones sobre acciones.
En una breve declaración suya, Chretien dijo que Madagascar Oil era cliente de Heenan Blaikie, un bufete de abogados canadiense ya desaparecido. Como abogado de la firma, Chretien dijo que hizo algunos trabajos para Madagascar Oil, pero que todas las tarifas fueron facturadas y pagadas a la firma de abogados en sí misma.
"Nunca recibí ninguna opción de acciones y nunca tuve una cuenta bancaria fuera de Canadá", dijo Chretien. "Cualquier informe de noticias que sugiera que he tenido o alguna vez tuve o estuve asociado de alguna manera con cualquier cuenta en el extranjero es falso".
Las medidas de evasión fiscal que implican fideicomisos offshore son legales, siempre que el fideicomiso se gestione de manera genuina en el exterior y que los impuestos canadienses se paguen sobre cualquier contribución canadiense. Y puede haber otras razones legítimas para establecer una cuenta extraterritorial, incluso si usted es un contratista que trabaja en un país en particular.
"Al establecer una empresa offshore, no se puede 'salirse con la suya si no paga su parte justa de impuestos'", dijo Ian Lee, profesor asistente de negocios de la Universidad de Carleton.
"Los fideicomisos offshore no son ilegales. Lo que es ilegal acerca de los fideicomisos offshore es no declararlo a CRA".
Los Paraísos son solo la última revelación que empaña el autoproclamado título del gobierno de Trudeau como campeón de la clase media.
Un plan para poner fin a las personas adineradas que utilizan la incorporación para reducir su carga impositiva fue ampliamente percibido como un ataque a los propietarios de pequeñas empresas, lo que obligó al gobierno a ajustar o retirar las propuestas.
El gobierno también se ha visto obligado a desconocer una directiva de la CRA que los descuentos a los empleados, incluidos los otorgados a los trabajadores con salario mínimo en el sector minorista, se consideran beneficios imponibles. Y todavía está luchando para explicar por qué los diabéticos de repente se encuentran inelegibles para un crédito tributario por discapacidad de larga data.
Los liberales prometieron tomar medidas enérgicas contra los planes de evasión fiscal cuando asumieron el poder por primera vez hace dos años, inyectando unos $ 1 mil millones en nuevos gastos en la Agencia Tributaria de Canadá para recaudar impuestos no pagados de
Entre los 13,4 millones de documentos filtrados, conocidos como "Paradise Papers", se encontraban los nombres del ex primer ministro liberal Jean Chretien y el principal recaudador de fondos del partido, Stephen Bronfman; la mera mención de quién dio nuevas municiones para que la oposición acusara al primer ministro Justin Trudeau de liderando un gobierno éticamente desafiado.
Ni la Agencia Tributaria de Canadá ni ninguna corte han determinado que ninguno de los canadienses identificados en los documentos haya hecho algo incorrecto, y tanto Bronfman como Chretien negaron cualquier participación en esquemas de evasión de impuestos en alta mar.
Aún así, el líder conservador Andrew Scheer calificó a Trudeau como un hipócrita por buscar agresivamente poner fin a las ventajas impositivas para las pequeñas empresas, mientras que prácticamente no toma medidas para acabar con los complicados planes de paraíso fiscal utilizados por los súper ricos.
Guy Caron, el hombre de punto del NDP en los Comunes, se unió a la refriega, acusando a la CRA de siempre dejar ir al "gran pez" cuando se trata de evasión de impuestos.
Trudeau se negó a hablar sobre ningún caso específico mencionado en los documentos, pero se comprometió a investigar las conexiones canadienses.
"Estamos totalmente comprometidos con la lucha contra la evasión y la evasión fiscal. Dejaré que los individuos comenten sobre sus propias situaciones, pero con respecto a Paradise Papers, la CRA está revisando enlaces a entidades canadienses y tomará todas las medidas apropiadas", dijo a los Comunes. durante el período de preguntas.
Los detalles, publicados por miembros del Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación, marcan la mayor fuga de documentos de paraísos fiscales que involucran a los canadienses. Los documentos -registros de clientes de la firma de abogados offshore Appleby, así como algunos registros de las firmas de servicios corporativos offshore Estera y Asiaciti Trust- contienen los nombres de más de 3.000 canadienses.
De acuerdo con Toronto Star y CBC / Radio Canada, los registros sugieren que Bronfman y su empresa de inversión con sede en Montreal, Claridge Inc., estaban vinculados a un fideicomiso offshore en las Islas Caimán. El informe planteó preguntas sobre una serie complicada de transacciones que involucran personas con vínculos con los partidos liberales.
En un comunicado, Bronfman dijo que hizo un único préstamo, en condiciones de independencia y totalmente comercial, hace unos 25 años, al fideicomiso que se pagó cinco meses después, una transacción que cumplía totalmente con la ley canadiense.
Bronfman, un amigo personal cercano de Trudeau, dijo que nunca ha financiado ni usado fideicomisos en el exterior, y que todos sus fideicomisos canadienses han pagado todos los impuestos federales sobre sus ingresos.
"Stephen Bronfman es un canadiense orgulloso y siempre ha cumplido totalmente con todos los requisitos legales, incluso con respecto a los impuestos", dijo el comunicado.
También entre los documentos filtrados había un registro de inversores en Madagascar Oil que enumera que Chrétien recibió 100.000 opciones sobre acciones.
En una breve declaración suya, Chretien dijo que Madagascar Oil era cliente de Heenan Blaikie, un bufete de abogados canadiense ya desaparecido. Como abogado de la firma, Chretien dijo que hizo algunos trabajos para Madagascar Oil, pero que todas las tarifas fueron facturadas y pagadas a la firma de abogados en sí misma.
"Nunca recibí ninguna opción de acciones y nunca tuve una cuenta bancaria fuera de Canadá", dijo Chretien. "Cualquier informe de noticias que sugiera que he tenido o alguna vez tuve o estuve asociado de alguna manera con cualquier cuenta en el extranjero es falso".
Las medidas de evasión fiscal que implican fideicomisos offshore son legales, siempre que el fideicomiso se gestione de manera genuina en el exterior y que los impuestos canadienses se paguen sobre cualquier contribución canadiense. Y puede haber otras razones legítimas para establecer una cuenta extraterritorial, incluso si usted es un contratista que trabaja en un país en particular.
"Al establecer una empresa offshore, no se puede 'salirse con la suya si no paga su parte justa de impuestos'", dijo Ian Lee, profesor asistente de negocios de la Universidad de Carleton.
"Los fideicomisos offshore no son ilegales. Lo que es ilegal acerca de los fideicomisos offshore es no declararlo a CRA".
Los Paraísos son solo la última revelación que empaña el autoproclamado título del gobierno de Trudeau como campeón de la clase media.
Un plan para poner fin a las personas adineradas que utilizan la incorporación para reducir su carga impositiva fue ampliamente percibido como un ataque a los propietarios de pequeñas empresas, lo que obligó al gobierno a ajustar o retirar las propuestas.
El gobierno también se ha visto obligado a desconocer una directiva de la CRA que los descuentos a los empleados, incluidos los otorgados a los trabajadores con salario mínimo en el sector minorista, se consideran beneficios imponibles. Y todavía está luchando para explicar por qué los diabéticos de repente se encuentran inelegibles para un crédito tributario por discapacidad de larga data.
Los liberales prometieron tomar medidas enérgicas contra los planes de evasión fiscal cuando asumieron el poder por primera vez hace dos años, inyectando unos $ 1 mil millones en nuevos gastos en la Agencia Tributaria de Canadá para recaudar impuestos no pagados de
Mi primo esta utilizando www.sinimpuestos.com , la mejor web para sociedad offshore Hemos seleccionado las siguientes jurisdicciones para las sociedades offshore por su estabilidad, leyes del aislamiento, honorarios bajos de mantenimiento, facilidad de incorporación así como ventajas en la reducción de impuestos. LA RECOMIENDO
ResponderEliminarBueno, les comentare mi opinión sobre sinimpuestos.con, es una plataforma confiable fácil de usar, sinceramente la recomiendo a todas las personas que quieran generar sociedad offshore... entra y crea! Recomendada
ResponderEliminarSinImpuestos es una de las mejores opciones para mejorar la vida y el futuro de tu empresa, ellos te asesorarán para la apertura de cuentas bancarias internacionales, sociedades y fundaciones offshore, criptomonedas (te aclararán cualquier duda), fideicomisos y más. ¡Con un buen servicio y buenos precios te ayudarán!
ResponderEliminar